¿En qué momento la Tierra se volvió habitable? Un estudio lo revela
Autor:

Redacción Digital

Los científicos del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT, por sus siglas en inglés), en EE.UU., descubrieron que las cianobacterias, responsables de producir oxígeno, generar y mantener toda la existencia actual del planeta, aparecieron en la Tierra hace aproximadamente 2.900 millones de años, creando las condiciones necesarias para que esta se volviera habitable, según un estudio publicado este miércoles en la revista Proceedings of the Royal Society B.

Curiosamente, esta estimación sitúa la aparición de la fotosíntesis oxigenada al menos 400 millones de años antes del Gran Evento de Oxidación, un período en el que la atmósfera y los océanos de la Tierra experimentaron por primera vez un aumento de oxígeno. Esto sugiere que las cianobacterias pueden haber desarrollado la capacidad de producir oxígeno desde el principio, pero que tomó un tiempo para que este oxígeno realmente se arraigara en el medio ambiente.

Ya somos 8 mil millones de personas en el mundo

Imagen: Las cianobacterias son organismos microscópicos procariotas con células muy simples que realizan fotosíntesis.
Las cianobacterias son organismos microscópicos procariotas con células muy simples que realizan fotosíntesis.

“En la evolución, las cosas siempre comienzan con algo pequeño”, dice en un comunicado el autor principal Greg Fournier, profesor asociado de geobiología en el Departamento de Ciencias de la Tierra, Atmosféricas y Planetarias del MIT. “A pesar de que hay evidencia de la fotosíntesis oxigénica temprana, que es la innovación evolutiva más importante y realmente sorprendente en la Tierra, todavía tomó cientos de millones de años para que despegara”.

Por ello, el número de especies de cianobacterias había aumentado considerablemente, lo que, según destacan los investigadores, podría haber dirigido la Tierra hacia el periodo de la Gran Oxidación, arrojando oxígeno a la atmósfera.

Para fechar con precisión el origen de las cianobacterias y la fotosíntesis oxigenada, Fournier y sus colegas emparejaron la datación por reloj molecular con la transferencia horizontal de genes, un método independiente que no se basa completamente en fósiles o suposiciones de velocidad.