El gasto público de la Asamblea entra en debate

La Asamblea Nacional firmó un contrato por USD 100.000 por el servicio de logística para reuniones, eventos, actos y ceremonias protocolarias. Se trata de un gasto público —en medio de la austeridad tras la pandemia de covid-19— para provisión de servicios que incluye desayunos que oscilan entre $15,50 y $24,75, almuerzos a $45 o cenas a $50,50.

El contrato pone bajo cuestionamiento las contrataciones de la Asamblea y genera polémica en redes sociales, bajo la administración de la presidenta del Legislativo, Guadalupe Llori, de Pachakutik. El documento fue suscrito el 10 de septiembre del 2021 y consta en el Sistema de Compras Públicas.

El pleno de la Asamblea está integrado por 137 legisladores. Esos son los precios que se pagarían en el Legislativo en la provisión del servicio de logística para reuniones, eventos, actos y ceremonias protocolarias y conmemorativas de esa función del Estado. El valor ofertado para la alimentación debe incluir servicio, montaje, mesas y sillas y transporte.

En un comunicado, la Asamblea Nacional se refirió al contrato y defendió los procesos realizados. Se argumenta que contratos similares con rubros más altos son “comunes” en las entidades del Ejecutivo.

“En administraciones anteriores el presupuesto igualmente asignado para el año que se utilizaba para la realización de eventos propios de la agenda parlamentaria fue aproximadamente tres veces más alto que la actual que cubre todos los eventos que se realizan en el Legislativo durante un año en las distintas provincias del país", se lee en el comunicado.

El contrato está firmado de manera electrónica por María Paulina Moreno, secretaría de Relaciones Internacionales e Interinstitucionales, y por el contratista Fredy Godoy. El servicio se ofrecerá por un año, según reza el contrato, en actos como posesión de autoridades, informe a la Nación del Presidente, visitas de Jefes de Estado, presidentes de Parlamentos y Delegaciones Internacionales.